domingo, 2 de outubro de 2016

"Creer"

    Un pequeño problema técnico con mi computador me dejó fuera del aire el fin de semana pasada, pero hoy -y a pesar de este resfriado (¡otro!), que me tiene medianamente podrida- aquí estoy de vuelta, ya con una hoja llena de ideas para nuevos cuentos y con fe en que finalmente los días fríos se van a acabar para que dejemos de andar estornudando y tosiendo por ahí. Son esos cambios bruscos e inesperados de temperatura los que acaban con uno... Pero hoy, aquí, ahora, el sol brilla, el aire está templado y empezando a llenarse de perfumes y mi hija y yo vamos a almorzar afuera, en la terraza de un restaurante cerca del cerro... ¿Quieren algo mejor?... Bueno, tal vez que este resfriado se me pase luego...
    Y aquí va la crónica de la semana, aprovechando al cielo azul y los pájaros revoloteando por todas partes.


    Miro mi vida, me doy cuenta de dónde he llegado, de lo que he conseguido, de la persona en que me he convertido, y me digo que creer ha valido la pena. Sí, ¿por qué no creer?... Creer en ángeles, en encuentros, mensajes, señales, en la intervención divina. ¿Por qué no creer que podemos hablar con nuestro cuerpo, con los animales, con la naturaleza, y que ellos nos escuchan y nos entienden? Hay que creer en amigos, en "coincidencias", en lecciones, en que todo sucede para mejor. ¿Por qué no creer que podemos mover la energía del universo a nuestro favor -o contra nosotros-? ¿Que somos capaces de percibir y participar de lo sobrenatural, que podemos hacer y recibir milagros? Creer en la inocencia, en la pureza, en los planes de Dios. Creer que podemos -y debemos- ser felices, libres, que nuestros sueños pueden realizarse, que merecemos todo lo bueno y que lo "malo" no es un castigo, sino lecciones que necesitamos aprender para alcanzar y comprender la verdadera realización y felicidad.
    Pues creer en todo esto y vivenciarlo plenamente es lo que me ha traído hasta este momento de paz, dicha, realización, juventud (a pesar de los sesenta) y optimismo. Creer es parte de nuestra humanidad, y si no lo hacemos, no importa en qué o quien, nos estará faltando algo que nada podrá reemplazar.

Nenhum comentário:

Postar um comentário