sábado, 11 de abril de 2015

"Estar y ser"

    Cosas buenas siempre suceden, sobre todo si uno tiene fe. No digo ese optimismo falso, sino la verdadera confianza en Dios y sus planes. ¿Alguna cosa no nos resultó?... Paciencia, debe haber una razón. Podemos reclamar un poco y chorearnos, a final de cuentas somos humanos e imperfectos, pero nunca perder la fe, por más que en ese momento no nos demos cuenta del motivo de ese traspié que parece ir contra nuestros planes o deseos... Hay que continuar viviendo y esperar, porque con certeza luego descubriremos por qué las cosas no nos resultaron... Y normalmente, es por un excelente motivo. Y yo lo he comprobado más que una, o dos, o tres veces. Hay que saber esperar y estar con la mente y el corazón abiertos, sólo eso.
    Y cambiando de gato para maleta, como se dice en Brasil ( y que significa cambiar de tema repentinamente) creo que esta semana que viene voy a escribir otra serie de cuentos cortos y voy a publicar. ¡Les aviso!... Ah, y los que mandé para el concurso... ¡No pasó nada! Pero eso no me va a impedir seguir intentándolo.
    Y ahora, a la crónica de esta semana:


    A veces me aterra darme cuenta de la fragilidad y brevedad de nuestra vida. ¡Cómo somos delicados! ¡Cómo estamos a todo momento expuestos a todo tipo de situaciones y peligros de toda clase que pueden lastimarnos, hacernos enfermar y hasta matarnos!... Sinceramente, no sé cómo duramos tanto vivos. Creo que debe ser porque lo deseamos mucho, porque le tenemos pavor a la muerte, o porque creemos que estamos aquí por alguna razón especial, una misión que tenemos que concluir... ¡Pero somos tan efímeros! Necesitamos ser muy fuertes para conseguir realizar algo, dejar un legado, por más pequeño que sea. Tenemos que luchar contra tantas cosas -la mayoría creada por nosotros mismos- para progresar, para construir, para mantenernos sanos y salvos. Parece que nacemos y morimos como si nada, que siempre va a haber más de nosotros, que somos tristemente substituibles, que no valemos tanto así... Y a pesar de eso, aquí estamos, batallando, conquistando, prosperando, inventando, aprendiendo, soñando ser mejores, vivir más y mejor, multiplicándonos. Nuestra tenacidad desafía a todas las dificultades porque  -al parecer- nuestra consciencia de "estar" y "ser" es tan poderosa que nos hace (o nos enseña) esquivar exitosamente a la muerte cada día. Y durante algún tiempo salimos victoriosos.
    Realmente, encuentro curioso y hasta paradójico que seres como nosotros, que deseamos tan ardientemente vivir en este mundo, tengamos como destino físico la muerte.

Nenhum comentário:

Postar um comentário