Dos semanas
sin computador… Ya estaba volviéndome loca de tantas ganas que tenia de
escribir este montón de ideas que dan vuelta sin parar en mi cabeza… Pero
finalmente mi bebé está aquí, entonces… Aquí vamos de nuevo!...
A qué somos fieles? A
ideas, a personas, a luchas, a religiones, a sueños, a misiones. Mas, sobre
todo, somos fieles al amor, que nos hace cargar todas estas banderas que
sostienen y le dan forma a nuestras acciones. Cada uno tiene que ser fiel a
aquello que escogió. Y esta opción debe ser siempre traspasada por el amor.
Así, nuestra fidelidad dará frutos que
todos podrán comer.
Me
quedo mirando los rostros, las ropas, las poses, los paisajes urbanos o rurales
atrás de las personas a veces serias, a veces sonriendo. Expresiones en negro y
blanco, algo señorial y distante, otros tiempos, otras historias, otros conceptos,
tal vez los mismos sueños de felicidad... Las fotografías antiguas me dan aquella
sensación de realidad extraordinaria, de enfrentar personas y lugares que nunca
conocí y que ya no existen más. Es, de cierta forma, como mirar a la muerte, a
algo remoto, sin embargo tan real como yo misma, hoy, aquí. Porque ellos tuvieron su presente también, y fue tan real y lleno de vida y acontecimientos cuanto el
mío! No es extraño el pasado asaltándonos así, tan actual y concreto, a través
de una fotografía? Cuánto podemos descubrir o imaginar mirándola?... Me pregunto:
cuando alguien mire una fotografía mía, cuánto de mi verdad irá a descubrir?
Qué estaré diciéndole a aquellos que estén mirándome em el futuro?
Nenhum comentário:
Postar um comentário